El nombre de LeBron James vuelve a sobrevolar la próxima postemporada de la NBA, como suele ocurrir. Eso es solo una de las muchas cosas que ejemplifican la grandeza de esta leyenda de 40 años. Incluso ahora, sigue teniendo el potencial de cambiar el rumbo de la liga.
Mientras los Lakers y el resto del mundo esperan noticias sobre la decisión de James respecto a su opción de jugador para la temporada 2025-26, también persiste la preocupación por su rodilla izquierda.
James sufrió un esguince del ligamento colateral medial (MCL) durante los Playoffs, antes de que terminara la temporada de los Lakers. En el nuevo episodio de su podcast junto a Steve Nash, Mind The Game, James ofreció una breve actualización sobre su lesión.
“Está mejorando. La última vez que hablamos…”, dijo James, para luego hacer una pausa sin dar más detalles. “Sí, está mejorando”, completó.
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La buena noticia para LeBron es que aún falta mucho para el inicio de la próxima temporada de la NBA. Sin importar lo que decida con su contrato, tiene varios meses por delante para asegurarse de que su cuerpo esté en óptimas condiciones para otra exigente campaña en el baloncesto profesional.
Si fuera el verano pasado, habría más preocupación inmediata al tratarse de un año olímpico. Pero este verano, LeBron ya ha dicho que planea dedicar bastante tiempo a ver jugar voleibol a su hija Zhuri. Ser espectador debería mantenerlo alejado del esfuerzo físico y permitirle sanar adecuadamente.
Siempre existe la remota posibilidad de que la estrella veterana se retire, pero parece más probable que continúe en la liga buscando otro campeonato, ya sea en Los Ángeles o en otro lugar.
James ha parecido casi invencible a lo largo de su carrera en la NBA, y esta última lesión es una muestra de que eso no durará para siempre. Pero aún tiene tiempo de sobra para recuperarse, y todo indica que su corona seguirá en su lugar cuando comience la nueva temporada.
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*Artículo original publicado por Billy Heyen y traducido por Facundo Echarren