De manera muy apropiada, en la base robada con la que estableció el récord, José Ramírez no necesitó deslizarse.
La superestrella de los Cleveland Guardians es uno de los jugadores más inteligentes de las Grandes Ligas. Eso le permitió tomar una enorme ventaja ante el lanzador de los Twins, Joe Ryan. Estaba a mitad de camino hacia la segunda base antes de que el lanzamiento llegara al plato, por lo que Ramírez robó la base de pie, sin necesidad de tirarse.
Esa fue la estafada número 275 en la carrera del dominicano. Con ello, se ha unido al club de 275 bases robadas y 275 jonrones.
Ramírez es el primer tercera base en la historia de la MLB en alcanzar esas cifras combinadas.
En total, 17 jugadores han logrado esos números.
Solo dos de ellos han sido bateadores ambidiestros: Ramírez y Carlos Beltrán.
El isleño también es uno de solo cinco jugadores que lo han conseguido dentro de sus primeras 13 temporadas, junto a Beltrán, Andre Dawson, Barry Bonds y Bobby Bonds.
Actualmente tiene 276 jonrones junto con las recién actualizadas 275 bases robadas.
Es un lugar impresionante en el que se encuentra Ramírez. En sus primeros 332 juegos en las Grandes Ligas, repartidos en cuatro temporadas, conectó un total de 19 cuadrangulares.
Desde entonces, sus totales por temporada han sido 29, 39, 23, 17 (en la acortada temporada de 2020), 36, 29, 24, 39 y los 21 que lleva hasta ahora en el 2025.
Ramírez es un jugador históricamente excelente. Tal vez no sea tan reconocido fuera de Cleveland como alguien de un mercado más grande podría serlo.
Pero este es un jugador de todos los tiempos, alguien que tendrá un caso serio para el Salón de la Fama.
Y ahora, ha hecho algo notable que ningún tercera base ha hecho jamás. Eso es algo especial.
*Artículo original de Billy Heyen y traducido por Ernesto Guevara