El domingo terminó de forma miserable para los aficionados de los New York Jets. Pero durante unas horas en la Semana 1, tuvieron mariscal de campo y parecían bastante capaces de vencer a los Pittsburgh Steelers.
En una comedia de errores verdaderamente "al estilo Jets", perdió 34-32 y cayó a 0-1. Fue otra decepción dentro de una racha de dos décadas de ellas. La derrota fue un regreso a un territorio familiar: el entrenador en jefe Aaron Glenn aún no ha logrado arreglar al equipo. Sin embargo, para una franquicia desesperada por tener un quarterback, parece que Glenn tomó la decisión correcta cuando le dijo a Aaron Rodgers que East Rutherford ya no era el lugar para él.
Nueva York desperdició uno de los mejores partidos de la carrera del mariscal Justin Fields. Al hacerlo, le dieron a sus aficionados un atisbo de esperanza en la posición de quarterback y mostraron de qué se tratará esta ofensiva.
El Shallow está para quedarse
El coordinador ofensivo Tanner Engstrand era una incógnita para los Jets al inicio de la temporada. El domingo dejó una muy buena primera impresión, y se apoyó en el concepto Shallow más que en cualquier otro pase.
Los Jets lo llamaron temprano y con frecuencia, incluso en el primer cuarto y dos veces en la última serie ofensiva —que resultó fallida— del partido. El concepto, que consiste en una ruta corta de arrastre (drag route) y, normalmente, una ruta de detención desde el otro lado de la formación sobre el centro del campo, le permite a Nueva York poner el balón en manos de sus playmakers con espacio para correr o lograr recepciones intermedias.
Fields nunca ha sido sobresaliente en el juego rápido, pero este diseño le permite soltar el balón fácilmente. Asimismo, las rutas asociadas al concepto le dan a Nueva York respuestas frente a diferentes coberturas. Al inicio del partido, Breece Hall corrió una ruta de riel (rail route), y cuando Fields vio que tenía ventaja en cobertura hombre a hombre contra un apoyador, le dio prioridad y terminó en una recepción completa.
No sorprende que Engstrand recurriera tanto al Shallow. Los Detroit Lions lo usaron con frecuencia, y con razón. Mantiene las cosas simples y explota el enfoque cargado a Cover 3 que Pittsburgh desplegó. Los Steelers ajustaron más tarde para defender el lado débil, lo que le dará a Engstrand algo para contrarrestar en la Semana 2. Se espera ver más de este concepto contra los Buffalo Bills.
Este ataque terrestre es excepcional
Hall, Braelon Allen e Isaiah Davis representan demasiado talento para un solo backfield, y Nueva York estuvo encantado de darle minutos a cada uno de ellos en la Semana 1. En particular, Hall lució como la estrella que arrasó defensas en su temporada de novato, acumulando 145 yardas totales y un touchdown por recepción. Se mostró explosivo y eficiente con sus pies.
También se benefició del prometedor rendimiento de la línea ofensiva, lo cual no estaba garantizado tras la baja de Alijah Vera-Tucker para toda la temporada. El tackle derecho Armand Membou tuvo algunos momentos de "bienvenido a la NFL"
frente a T.J. Watt, pero logró desquitarse en un debut alentador. Los Jets podrían tener a dos estrellas anclando su línea ofensiva, y quizá no sea casualidad que Joe Tippmann se haya visto mejor como guardia que como centro.
La gravedad de Fields como corredor fue evidente, y puede que haya dejado puntos sobre la mesa al no quedarse con un balón en una acción de read option con Allen al inicio del partido. Su movilidad nunca estuvo en duda, y Nueva York lo va a usar con frecuencia, muy al estilo de cómo lo hicieron los Chicago Bears en 2022. Antes del partido de Monday Night Football, los Jets ocupaban el quinto y sexto lugar en rushing EPA y tasa de éxito, respectivamente (según rbsdm). Más allá de lo engañoso de una muestra de un solo partido, la capacidad de Nueva York para ganar por tierra parece bastante sostenible.
Engstrand lo está haciendo sencillo
Los primeros resultados de las decisiones de Engstrand como play-caller fueron alentadores. Los Jets se apoyaron en las fortalezas de sus mejores jugadores, usaron bastante motion y play-action, y no dejaron a Fields expuesto como un pasador prototípico de dropback.
Una jugada que destacó fue el pase más largo de la tarde para Fields: un touchdown de 33 yardas a Wilson. No fue una obra maestra innovadora desde el punto de vista táctico; ejecutar Ace Posts es una audible frecuente incluso para niños de ocho años lanzando profundo en Madden. Pero lo importante es notar cómo Engstrand preparó a su mariscal de campo para tener éxito.
Good look at the 33-yard #Jets TD pass from Justin Fields to Garrett Wilson.
— Josh Carney (@ByJoshCarney) September 8, 2025
Darius Slay just gets beat. Doesn't seem like he was expecting help on the crosser from Jalen Ramsey. Just gets outrun.
(Cc: @DemetriGeorge) pic.twitter.com/SBP7btpLXq
Los Steelers le mostraron a los Jets muchísimas coberturas Cover 3. Si los defensores de zonas cortas están ocupados, surge la oportunidad de aislar a un esquinero contra la ruta post en la que el safety central no brinde ayuda. En este caso, fue Wilson, quien aprovechará esa ventaja contra un esquinero de 34 años como Darius Slay Jr. cualquier día de la semana.
Pittsburgh colocó a sus cazamariscales abiertos hacia afuera de los tight ends con frecuencia cuando estaban alineados (o al menos en proximidad) a la línea ofensiva. Nueva York llevó a Mason Taylor y Jeremy Ruckert a la línea. Ambos bloquearon primero a los edge rushers de los Steelers antes de salir a sus rutas. Esto permitió que Olu Fashanu y Membou se posicionaran mejor y alargaran el trayecto hacia el mariscal de campo. El interior cumplió con su parte, y Fields tuvo tiempo de sobra para lanzar un pase preciso.
Por supuesto, las cosas aún pueden torcerse. Fields ya ha mostrado destellos antes, y Engstrand tuvo meses para preparar un plan contra la defensa de Pittsburgh. Sin embargo, en el debut, la dupla pasó la prueba con sobresaliente. Los aficionados de los Jets están acostumbrados a ilusionarse con quarterbacks. Por ahora, se conformarán con una ofensiva que luce mucho más atractiva que en años anteriores.
*Artículo original de Anthony Licciardi y traducido por Ernesto Guevara