Los Angeles Lakers no quisieron pagarle a Alex Caruso. Después de la temporada 2021, el base se fue de L.A. como agente libre y firmó con los Chicago Bulls por cuatro años y 37 millones de dólares.
En retrospectiva, es increíble que los Lakers no hayan reconocido lo que ya tenían frente a ellos. Caruso era uno de los compañeros de cancha favoritos de LeBron James, lo que normalmente garantiza continuidad. Pero en lugar de eso, lo dejaron ir.
Y el domingo, mientras los Lakers estaban en casa, Caruso llevó a los Oklahoma City Thunder a las Finales de la Conferencia Oeste con una actuación increíble en el Juego 7 contra los Denver Nuggets.
Caruso tuvo el mejor plus-minus del partido del domingo, un impresionante +40. Los Thunder superaron a los Nuggets por 40 puntos durante los 26 minutos que Caruso estuvo en la cancha. Eso es una locura.
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Anotó 11 puntos con 5 de 7 en tiros de campo y sumó tres asistencias y tres robos. En defensa, Caruso fue la misma molestia de siempre. Incluso pasó muchas posesiones defendiendo a Nikola Jokic, quien es mucho, mucho más grande que el base de los Thunder.
Es imposible saber cuál habría sido el efecto mariposa si los Lakers hubieran renovado a Caruso hace cuatro años. Tal vez todo habría sido muy distinto, o tal vez los Lakers habrían cometido otro error y seguirían igual.
Pero, hombre, es difícil ver cómo juega Caruso y no preguntarse en qué estaban pensando en L.A.
Es un jugador de rol tan valioso como se puede encontrar a nivel de campeonato. Y ahora está tratando de ayudar a otro equipo del Oeste a llegar a la cima.
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*Artículo original publicado por Billy Heyen traducido por Facundo Echarren