Los Angeles Dodgers siguieron su más reciente campeonato de la Serie Mundial con importantes incorporaciones de estrellas al equipo. Pero uno de sus jugadores más emblemáticos y habituales en el Juego de Estrellas ya ha tomado una decisión respecto al Clásico de Media de Temporada.
Tras haber sido seleccionado al All-Star en ocho de las últimas nueve temporadas -además de haber ganado seis Guantes de Oro, siete Bates de Plata y un premio al Jugador Más Valioso durante ese tiempo- el infielder Mookie Betts tiene de sobra con qué adornar su vitrina.
Pero después de haber participado en el Home Run Derby de 2023, parece que hay un trofeo del béisbol que nunca podrá conseguir.
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Fue eliminado en la primera ronda de esa competencia, conectando apenas 11 cuadrangulares, la menor cantidad entre todos los participantes. Y después de esa actuación, parece que ha decidido no volver a intentarlo.
"¿Quisiera estar en el Home Run Derby otra vez? No, absolutamente no", dijo Betts en un episodio reciente de su pódcast On Base. "Lo hice una vez... fue una pésima idea", concluyó.
Aunque Betts es un bateador prolífico, no se le conoce tanto por su poder como por su capacidad de hacer contacto. En 12 temporadas en las Grandes Ligas, tiene una línea ofensiva de .293/.372/.521, y conectó solo 19 jonrones en 2024.
A pesar de seguir siendo un bateador destacado bajo casi cualquier métrica, su capacidad para mantenerse al nivel de jugadores como Vladimir Guerrero Jr. o Pete Alonso podría estar en duda.
Betts agregó que, sin dar el máximo esfuerzo, no logra sacar la pelota del jardín. Y hacer ese esfuerzo en cada swing durante un derby simplemente no sería sostenible.
"Si no hago el swing al 95% cada vez, la bola no pasa la cerca", dijo. "Yo no doy jonrones en la práctica de bateo", cerró.
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*Artículo original publicado por Peter Chawaga y traducido por Facundo Echarren