Los Angeles Lakers podrían beneficiarse de contar con un veterano experimentado como Chris Paul la próxima temporada.
El jugador de 40 años será agente libre este verano tras haber disputado la temporada 2024-25 con San Antonio Spurs, y ya ha sido vinculado al equipo del Oeste liderado por Luka Doncic y LeBron James.
Si el entonces comisionado de la NBA, David Stern, no hubiera vetado el traspaso de gran escala en 2011 que habría llevado a Paul a los Lakers, quizá hoy el futuro miembro del Salón de la Fama formaría parte de la franquicia.
Aunque Paul ya se encuentra en el ocaso de su carrera, aún podría ser un fiable maestro del pick-and-roll y un mentor con valiosa experiencia en Playoffs.
Sin embargo, Paul debe decidir primero si quiere continuar su carrera profesional. El jueves, el 12 veces All-Star habló sobre su futuro en la NBA durante el programa de Pat McAfee.
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"Todavía amo jugar al baloncesto y estoy en el gimnasio todos los días", dijo Paul. "Mi decisión tiene más que ver con la familia que con cualquier otra cosa", reveló.
Sin duda, Paul está dividido tras completar su vigésima temporada en la NBA. Por un lado, el producto de Wake Forest no ha perdido su pasión por el juego y sigue comprometido con perfeccionar su talento a diario.
Por otro lado, Paul -quien promedió 8.8 puntos y 7.4 asistencias junto a Victor Wembanyama este año- es un hombre de familia y quiere asegurarse de pasar la mayor cantidad de tiempo posible con sus seres queridos.
Teniendo en cuenta que una temporada de la NBA consta de 82 partidos (más si el equipo llega a Playoffs) y exige constantes viajes, le será difícil al base de 1.83 metros lograr ese equilibrio si decide regresar una temporada más.
Aun con el futuro incierto de Paul, los Lakers deberían seguirle la pista a medida que se acerca la agencia libre.
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*Artículo original publicado por Caleb Hightower y traducido por Facundo Echarren